La decena
Cuenta hasta siete.
El diez está muy lejos todavía.
¿Por qué morir?
¿No te sirve la vida como experimento?
Llámalo por su nombre de pila
y cuando gire su torso para verte,
dile que la fe se escapó de entre tus manos.
Ayer,
por la noche.
Cuando encontraste tu casa pintada de ausencias.
Uno.
Tres, cinco y siete.
Llegaste.
Lee tu rostro con el pulso extremado del dolor.
La piel respira.
De nuevo.
Debajo de tu vestido amapola.
Aún falta mucho.
1 comentario
kris -
Estoy contenta de pasar por aquí y poder leerte...
Saludos