Libros, libros y más libros
Ya no están en el suelo. Anoche durmieron por primera vez en su nueva casa: contrachapado cortado a medida en Hipercor, "la máquina de hacer agujeros", unos cuantos tornillos y seis escuadras para que la estantería no se descuajaringue de repente. He descubierto que tengo libros que ni recordaba, y eso que son los que están en esta casa, y los veo cuando entro y salgo del comedor o de la habitación.
Esta mañana he terminado de recolocar el resto -el situar juntos todos los de bolsillo ha conllevado mover ejemplares de aquí para allá-. Al principio, he procurado agruparlos por temática, pero al final he desistido: por ejemplo, cuando ya pensaba que tenía todos los de novela policiaca o de misterio, al rato, y estando ya con los libros en catalán, han aparecido dos o tres libros -"Lluvia", de Simenón, ha sido uno- para destrozar el "supuesto" orden -dudo de que en algún momento haya existido algo así en mis estanterias-. Esta ¿incidencia? -esa palabra me perseguirá de por vida- me ha ocurrido en varias ocasiones, con lo que, ya digo, lo he dejado estar y he ido poniendo las novelas tal cual las iba cogiendo del suelo, sin mirar más.
En un momento dado, hasta he pensado que no estaría mal el hacerme una pequeñita base de datos para saber qué libros tengo -por aquello de no comprar lo que ya está colocado en casa en un estante-, pero la intención me ha durado mucho menos de lo que estoy tardando en redactar esta anotación: nada de listas. Quizás, si me lo repito muchas veces, acabaré creyendo que no las necesito. Nada de listas, Salomé; nada de listas: haced, sin más. O como diría mi hermana, más ocuparse y menos preocuparse. ¿A qué viene esto? Asociación de ideas, creo recordar:
.- suelo--->libros--->estantería--->orden--->lista--->agobio--->PEREZA.
.- pereza--->modus vivendi--->problema--->solución--->DURACELL.
Y de ésta, me voy a la cama. Creo que el diazepam que me he tenido que tomar para mi dolorido cuello me ha jugado una mala pasada. Mañana será otro día.
10 comentarios
Bambo -
Lo pensé, sí. Pero es que los tengo desperdigados, parte en casa de mis padres, parte en la casa del pueblo y parte en mi casa. El problema es que no hay demasiado espacio para colocarlos y he de acomodarlos según lo que tengo. Por esa razón me planteé el hacer la mini-libería que se ve en la foto: creo que mide 18 cm de profundidad, y está colocada en una zona de paso. Con estas premisas, sólo cabían libros de bolsillo y similares. Por eso no puedo clasificar demasiado, :-/
solodelibros -
elisa de cremona -
un beso
Bambo -
Listas fuera, sí señora. Mola tenerte por aquí, aunque alguna vez me llames Salmonete -ésa te la tengo guardada-.
capitana -
Bambo -
He tenido que dormir en casa de mis padres: el olor a pintura era insoporteibol. ¿Dije naranja? Diossssssssssssssss, le voy a hacer una foto al pasillo antes de retomar la faena. Es naranja, tan naranja que no me va a hacer falta comer de ese cítrico durante meses. Y estoy dudando: me gusta, me gusta mucho, pero como no tiene luz y el suelo es tan hiper-mega-estrambótico, le faltaba un color tan chillón para que el puñetazo visual te deje fuera de juego, jajaja. Lo voy a rebajar: No le vuelvo a hacer caso a ninguna dependienta en lo de los colores. "Que sí, hazme caso, que se queda como en la tapa, igualito, de verdad, que no te hará falta rebajarlo en blanco; estos de "Bruguer" trabajan muy bien". Y una leche... jodios. Menos mal que compré otro bote, que sino, me tocaba tener el pasillo cual huerta valenciana, pero sin el verde, durante dos semanas más : mañana empiezo un curso -malditos puntossssss; el día que apruebe la opososición quemo todos los apuntes- de excel avanzado y en dos semanas, ni por la mañana -el curro- ni por la tarde... Bué, voy al tajo.
Me mola que os mole -cómo me molo hablando en molón, jajaja- el rinconcillo. El cuello está bien: he sido cauta y desde que empecé en estas faenas caseras he ido medicándome "antes de", para paliar posibles excesos. Hasta las manos me duelen...
Lo de Duracell... no lo decía por lo que habéis supuesto: malos, malosos, :-D Pero vamos, que si son necesarias para una maratón, se emplean, :-P
Y no digo de qué tipo de maratón estoy hablando: ¿una prueba de esfuerzo para ver si aguantaría el tipo? Ana*, porque donde te hiciste la tuya me pilla pelín lejos, pero lo cierto es que me quedé flipadilla con tanta información. A mí me haría falta algo así para valorar mis puñeteras taquicardias, pero bué, como no he de correr... uyyyyy, me callo.
Besicos a toos, guapetones.
Bielka -
Y cuídate el cuello.
(Por cierto, de vaga nada, que hacer una estantería tiene un buen trabajo y su mérito: no es tan fácil como parece)
Aspi -
Yo, ya lo comenté por ahí, he tenido que llevar libros al pueblo porque no cabían; algunos viejecísimos, de cuando yo era moza y eso.
En fin, que los libros son la -segunda- cosa mejor del mundo.
A cuidarse ese divino cuello de garza, guapa. :-)
Ana* -
Pues a mí se me ocurre
DURACELL --> conejito...
y ya no sigo, que luego todo se sabe. :o)
Que cuando quieras te vienes a mi casa a ordenar mis libros, que parece que has cogido práctica :-P
Que mejore ese cuello, hermosa.
antwad -