La buena estrella
Lo reconozco: soy envidiosa. Hace unos días, creo que fue el lunes, hablaba de lo importante que es nacer con estrella. Hoy, después de escribir la entrada titulada Aturdida he llegado a la conclusión de que, con independencia de la cuna, una puede, al menos, hacer un intento por paliar la falta de padrinos y de fortuna. Después de tan tremendísima e importante reflexión, he salido a la calle y me he ido a una tienda llamada Moneries -una especie de bazar repleto de cosas de diseño, mezcla de chic, fashion y friqui- con la pretensión de adquirir cualquier cosa que tuviese la forma de una estrella. He tenido suerte, como podéis ver en la foto. Y suerte por duplicado, ya que lo que he comprado han sido unos pendientes. En cuanto he llegado a casa me los he colocado. Ahora voy a salir a pasear a Zas. Espero que a mi vuelta pueda contar aquí lo que se siente cuando una persona está protegida por la magnificencia de un cuerpo celestial.
Estoy empezando a ser feliz, lo noto. ¡Qué poco se necesita a veces!
6 comentarios
seamos cínicas -
demasie -
Bambi -
tarado -
Bambolia -
Creo que te quedarían un tanto grandes, demasié, :-)
demasie -