Crónica de cómo se llega a odiar a la compañera

Si esta tarde aguanto el tipo y soy capaz de no dejar sorda de un berrido a mi compañera de mesa, será un milagro de no sé que Dios... He comenzado a rezar letanías para calmarme.

Primera versión de la tarde: no estoy nerviosa, no estoy nerviosa, no estoy nerviosa, no estoy nerviosa.

Segunda versión de la tarde: haz como si no la oyeras, haz como si no la oyeras, haz como si no la oyeras.

Tercera versión de la tarde: no está hablando en voz alta, es ruido de fondo; no está hablando en voz alta, es ruido de fondo; no está hablando en voz alta, es ruido de fondo.

Cuarta versión de la tarde: no la soporto, no la soporto, no la soporto, no la soportooooooooooooooooooooooooooo.

Previsión de aquí a las 21 horas: ponerme en contacto con algún servicio funerario para que estén esperando a la puerta con el coche fúnebre, porque una de las dos hemos de morir. O ella porque me tiraré a su cuello o yo porque me dará un soponcio.*

*Entiéndase como una metáfora necesaria, muy necesaria. Y me quedan días... :-/

5 comentarios

[Bambo - 15 de diciembre de 2005 - 10:12]

Ayer el profe ya le dijo que estaba un "poco renegona"...

Un dato que se me había pasado por alto: de 14 alumnos en el curso, 13 somos mujeres; algo extraño para mí, que de 8 que somos en mi departamento, soy la única mujer -y porque ocupo el puesto de secretaria... que si no, ni modo-. Cada vez tengo más claro que los puestos inferiores de la Administración están ocupados, mayoritariamente, por mujeres.

[antwad - 14 de diciembre de 2005 - 17:31]

Uy, sufres en tus carnes el modelo de persona, aquí no hay sesssos que valgan (chiste incluido), que crispa al mismo Job, que es pelota hasta conseguir el vómito colectivo y que -parece- tener pocas luces y las pocas están ocupadas en otras cosillas mentales (a saber cuáles)... Solución... no hay! :-)

[Bambo - 14 de diciembre de 2005 - 12:57]

Me costó aguantar el tirón, la verdad. Hacía tiempo que alguien no me sacaba de mis casillas. Suelo ser persona paciente, a veces, en exceso. Y tragar carros y carretas por no montar un pollo o ser franca, sin hipocresías sociales de por medio, porque existen muchas personas que no reciben bien una contestación seca, tajante y clara, sin más.

Es la típica persona que hace ostentanción, de manera pública y notoria, de que no se entera de nada, y encima, en plan gracioseta, como una niña... y cada cosa que no le sale -que es casi todo- lo dice para que se entere toda la clase...

Bielka, no lleva maquillaje, con lo que si me tiro a su cuello, seguro que acertaré, :-D

Sinfo, las ñoñas son repelentes: de las que suelen hacerle la pelota al jefe hasta provocar las naúseas en terceros observadores.

¿Se nota que estoy pelín asocial?

Tantos buenos sentimientos empaquetados con papel de regalo me descolocan...

[Sinfo - 13 de diciembre de 2005 - 20:41]

Yo ahora tengo enfrente a una ñoña más falsa que Judas, de esas que dicen cariño y bonita a todas horas, con su carita de oveja y sus ojitos saltones y todo.
Es una vecindad temporal; ni siquiera es compa mía de verdad-verdad, sino que pertenece a los transferidos a la Comunidad, aunque estamos todos en el mismo local.
Nosotros pronto nos volveremos a nuestro sitio, cuando se acabe una obra que están haciendo en la oficina. Entonces espero pasar días y meses sin verla ni oírla.
Será maravilloso.

A ver si te puedes cambiar de sitio, Bambo, diciendo que en ese hay mucha corriente o algo y que es malo para tu lumbago.

[Bielka - 13 de diciembre de 2005 - 20:18]

¿Con unos tapones para los oídos crees que servirá para no oirla? me imagino que debe resultar insoportable si no se calla.

Oye, si te tiras a su cuello, procura que no lleve maquillaje, que si no te resbalas y no podrás cumplir con tu cometido. :-P