Espíritu joven

Recordatorio nº... ni me acuerdo ya.

Da igual: en realidad, tan solo quería dejar constancia de que estoy harta de toda esa gente que me viene con el cuento de "es que fulanito tiene el espíritu joven" o "es que menganito, a pesar de sus cincuenta y pico, sigue viviendo como un adolescente".

No me gusta. Me parece una negación de la realidad: cuando algo no se acepta plenamente, se disfraza para que parezca otra cosa. Tienes cuarenta años, colega, pero... ¡chica! no pasa nada; mientras mantengas el espíritu joven, todavía queda esperanza.

Sí, sí, sí -lease con ei típico tono de sonsonete-: espíritu joven, dicen... para salir de noche hasta las mil; para agotarte hasta la extenuación un día tras otro, ocupando todas tus horas para que nadie pueda colgarte el cartel de "Muerma Mayor del Reino"; para vestir como la hija de tu vecina, que se coloca una falda con volantes encima de unas mallas con botines.

La juventud se va, es transitoria, como todo en la vida. Y está bien que así sea. Yo no quiero tener el espíritu joven: es una pura entelequia. Es más, es una perogrullada del veinte. Mi ánimo, mis deseos, mis anhelos, mis dudas, mis miedos, mis gustos se corresponden con lo que soy ahora, una tipa normalita que está hasta los mísmisimos ovarios de que le pretendan vender la moto con estupidices de ese calibre. Se puede ser optimista o pesimista, ser luchadora o por contra, una persona pasiva... Y además, con el añadido de que, las más de las veces, esos comportamientos no son constantes, sino que se alternan. Pero eso de ser perpetuamente joven... como que no.

¿Dónde se queda la experiencia, lo asimilado, lo respirado, lo pensado? ¿Guardado en un cajón, esperando a que el espíritu joven se vaya de parranda?

Pues eso.

6 comentarios

[Bambo - 24 de octubre de 2006 - 17:59]

No, Alsen. No creo que sea una figura literaria...

Es mucho más que eso: ayer busqué cuántas referencias hay en google que contengan la expresión y pasan de cincuenta mil. Algunas de ellas eran sobre jubilados y ancianos -o mayores, palabra que, dicho sea de paso, me parece una memez de las gordas... no la palabra en sí, claro, sino el uso que se le da para no herir susceptibilidades... me pregunto qué si acaso no ha pensando nadie que comenzando desde niños a aceptar la realidad, llegados a viejos no haría falta ese tipo de eufemismos estúpidos para mencionar una situación de la vida-.

He de buscarlo, Alsen. Te lo envio por correo en cuanto lo tenga.

Gracias, Delfín, :-D

[Alsen - 24 de octubre de 2006 - 01:02]

No te preocupes, es una figura literaria, una comparación usada en Literatura y ya sabes, en Literatura hay poca realidad y mucha ficción.

Oye, a ver si me ayudas a insertar música en los post con Catspots.

¡Que esta en inglés COMO Flickr!

Erre que erre...

[Delfín - 23 de octubre de 2006 - 16:35]

¿Cómo no estar de acuerdo? Certero e inteligente, Bambo. Chapeau.

[Bambo - 23 de octubre de 2006 - 15:46]

A mí es que eso de la juventud como un estado mental no me convence: concibo la juventud como una situación transitoria, como un período de la vida, pero no como una forma de afrontar la vida.

Cada vez le tengo más manía a la gente que me dice ese tipo de cosas...

¿No sería más lógico potenciar la aceptación de lo que una es , en el momento actual, sin necesidad de espíritus sobrevenidos, rescatados de épocas pretéritas, con un elevado porcentaje de acné?

¿Cómo se entiende que una se mire al espejo y se vea los michelines, las estrías, las pequeñas varices y todas esos "defectos" que nos hacen seres humanos y que son la evidencia palpable de que hemos vivido y estamos aquí y después de eso se diga "sí, sí, pero es que yo tengo el espíritu joven"?

Anda ya... Y no sólo es por las salidas nocturnas y por los humos y por las conversaciones estúpidas... Es que reunirme con ciertas personas con las que estaba a los veinticinco ya no me motiva, porque entonces lo hacía sin pensar demasiado y ahora me niego porque pienso y decido que no pierdo mi tiempo con algo que no me place. ¿Acaso esa pequeña victoria mía, la de no sujetarme a esas tiranías sociales tiene algo que ver con el espíritu joven? Leñe, que estoy harta de fumetas, de risas estúpidas por ir puestos de porros y copas de más... ¡qué felices somos todos y qué divertida es la vida, oiga usté! Una lucha desesperada por estar a la altura de los que todavía aguantan una noche entera sin dormir...

Y si te quedas en casa eres una abuela y si te da por levantarte a las nueve y no a las doce te pareces a tus padres y si te da, y si te da y si te da... Uffff...

[Aber - 23 de octubre de 2006 - 11:12]

Sastamente, Bielkilla: los consumidores potenciales más numerosos son aquellos treintañeros o aquellos cuarentones que tienen el espíritu tan joven. Tampoco entiendo eso de que para ser joven debas estar obligado a pasar la noche en locales mal ventilados e infestados de gilipollas. Visto así no suena tan bien, ¿eh?

Creo que, en todo caso, la juventud supone entender los cambios, tener ilusiones y guardarse para uno mismo la capacidad de sorpresa. O no. Tampoco es necesario ser o sentirse joven. Puedes sentirte viejo, porque tienes derecho a hacerlo. Nos venden tanto la juventud como algo positivo y no tiene por qué serlo.

[Bielka - 23 de octubre de 2006 - 01:32]

Yo no me siento joven sino cansada. Y no me apetece irme de marcha, sino dormir 20 horas seguidas. De hecho, creo que nunca he sido joven porque siempre he aguantado muy poco de marcha y me dormía por las esquinas.

Recuerdo que hace tiempo hablábamos de esto. Sí, Bambo, estoy contigo. Lo del espíritu joven es una gilipollez muy grande. Es para que nos compremos botox y nos asiliconemos y cortemos y cosamos cual marujitas díaz.