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De espaldas

Mujer al volante...

...peligro constante.

Sí, ya sé. Es un topicazo. Pero parece ser que los de Allianz Seguros no lo tienen tan claro. Es más, después de ver su último anuncio televisivo sobre su seguro de coches, no me cabe otra que deducir que ellos son de los que piensan que los tópicos lo son porque encierran un alto grado de verdad -¿cómo era aquello... "cuando el río suena es que agua lleva"?-.

Para el que no suela ver la tele o ande pelín despistado: un señor cincuentón, de buen ver, está en una especie de aparcamiento junto a una joven -luego se deduce que posiblemente sea su hija-. Lleva un coche grande. No me atrevería a decir que de lujo, porque no todos los coches grandes lo son. Pero, desde luego, tiene toda la pinta. No sé, tipo Audi 4 o BMW: de esos que no pasan desapercibidos. De repente, entra en escena una señora, cincuentona también, con aire juvenil -se da a entender por la ropa-. Esgrime en la mano una tarjeta -por lo que ocurre después, se trata del carnet de conducir-. Su marido -como es ficción, yo me lo guiso y yo me lo como, :-D -, con evidentes muestras de alegría por lo que significa esa cartulina en la mano de la mujer, le abre la puerta del copiloto, para que aquella entre al automóvil y se puedan marchar. La señora, en un acto de pequeña rebeldía, le coge al hombre el llavero de la mano y se va directamente al puesto del conductor. El caballero, un tanto contrariado, hace un mohín de aceptación resignada y se mete en el vehículo. En ese momento se escucha el siguiente lema: "Con Allianz te sentirás seguro". The End.

Duda existencial: ¿Acaso no saben estos señores que, según las estadísticas -aunque siempre los hay que las ponen patas para abajo para tratar de cuestionar algo que es bastante evidente- las mujeres somos bastante más prudentes conduciendo y los accidentes que provocamos suelen ser menos graves que en los que se ven involucrados los varones? ¿Acaso, sabiendo como saben, que la mayor tasa de siniestralidad se da entre los conductores más jóvenes, debido a que a la inexperiencia -situación que iguala a todos los noveles al volante-, se le suma la temeridad, no hubiera sido más lógico realizar el anuncio con un hijo de papá, de esos pipiolos que se ven hoy en día por las calles, escuchando música en sus "carros" a un volumen infernal? ¿No resulta paradójico que empleen a una mujer para darle a entender al televidente que si el que conduce es inexperto, ellos van a estar seguros porque los posibles accidentes que ocurran van a estar respaldados por una compañía seria, de las que cumplen, cuando son las propias empresas de ese sector las que bonifican las cuotas de sus clientas, porque los datos de siniestralidad femenina son mucho más bajos? -menudo pedazo de interrogación... resopla y detente, si has sido capaz de leer de un tirón-.

Me repatea, sin más. Porque es caer en el estereotipo más injusto: mujer+cincuentona+volante=temeridad total. En este artículo su autor reconoce que, detrás de los comentarios jocosos y chacarrillos varios sobre ese asunto, se esconde el desprecio y el ninguneo. Ya lo he dicho más de una vez aquí: el día que algún otro hombre, sentado a mi lado, se atreva a decirme eso de "anda, hubiera apostado lo que fuera a que eras incapaz de meter el coche en ese sitio", lo hago bajar del vehículo y no vuelve a subir a él.

Y puede parecer que lo digo en tono de broma, pero sabiendo como sé el genio que me gasto cuando voy conduciendo -asustaito tengo a mi Ángel de la Guarda-, casi con seguridad que acabaré haciéndolo -y me refiero a lo de no dejar subir más a mi coche a un varón con complejo de profesor de autoescuela y además, misógino-.

17 comentarios

Bambo -

Yo otra vez... en mi apodo dejo el enlace al cochecito de marras. Era un Wolkswagen Touran. ¡Menuda panda de idiotos!

Hala, que me voy a casa de mis padres a hacerles la comidica, que hoy están pelín pachuchos y necesitan mimos, :-D

Bambo -

Anoche recordé que hace tiempo, no demasiado, estuvieron haciendo un anuncio de un coche. No recuerdo qué marca ni mucho menos el modelo. Una pareja se acercaba a una inmobiliaria o a las oficinas de una constructora y el comercial de turno les enseñaba a los tortolitos una maqueta de la vivienda que ellos querían comprar. Era una unifamiliar, de las típicas que se ven en las pelis estadounidenses que sitúan su acción en barrios residenciales -¿recordáis la serie \"Aquellos maravillosos años\"? pos igualita-. El chico, mientras su chicha hablaba con el vendedor, iba recreando la situación de lo que podría llegar a ser su vida allí: la mujer a la puerta de la casa, despidiéndolo cuando él se fuese al trabajo; los niños correteando en el trocito de jardín que les tocaba por parcela... y él, cómo no, a medida que todas esas cosas pasaban por su cabeza, se iba \"acojonando\" por lo que suponía de asunción de responsabilidades. ¿Cuándo tomaba el colega la decisión de comprar y tirarse a la piscina? Cuando su vista se dirigía al vehículo estacionado a la puerta del garaje... ¡oh! Dios mío!!! Casi mejor que un orgasmo... Ahora que recuerdo, me suena algo de Tourán... parecido. El anuncio era patético. Eso sí, presentado con un aire muy simpaticón, muy de colegueo, muy de \"tíos, nosotros nos entendemos: la casa y los niños para ésta idiota que está conmigo, y el coche para mí, que es lo que mola\".

Pues eso...

J.A., que menos mal que las dos o tres veces que has subido conmigo en coche no has dicho ni mú...

Me superan esas conversaciones de \"tío, ¿sabes? he venido de Valencia a Linares en una hora y cuarto\". Y luego se descojonan de ti cuando dices que has tardado una hora y cuarenta y cinco minutos -los cuarenta últimos kilómetros son curva sí, curva también-.

Pues eso, que ¿qué decir ante esos chóferes tan inconscientes? Y ahora que mento a los chóferes... en Linares -ya lo he dicho alguna vez aquí- existe la \"Peña de las Rebotadas\" porque cuando pedimos -yo tenía 16 años entonces- que se nos admitiese como socias en la Asociación de Chóferes que celebra fiesta en honor de San Cristóbal, nos dijeron que ni modo. Que los chóferes eran hombres y que así iba a seguir siendo. Sin comentarios...

J.A. -

Entono un mea culpa: yo era de los que daba indicaciones cuando la conductora era una mujer. Hablo en pasado porque es algo que ya no hago. Un día mi mujer paró el coche en una zona de descanso, de camino a Zaragoza, y me dijo que si tan mal lo hacía, que condujese yo. Cuando me explicó que yo parecia un profesor de autoescuela, examinándola permanentemente, me dejó mudo. No sabía qué responderle, porque la verdad, tenía razón. Hasta el punto que si iba al lado de un hombre yo sí que rehacía sus maniobras dudosas, pero sin abrir la boca. Cuando era mi mujer o mi hermana, entoces las corregía en voz alta.

Otra cosa que ella me hizo ver es que los hombres, cuando hablamos de coches y de conductores, contamos las batallitas de la mano del abuelo Cebolleta y nos colgamos medallas por haber echo Valencia-Madrid en dos horas y cuarto cuando lo mínimo, a 120 km la hora, serian tres. Competiciones a ver quien es el más rápido y a ver cuanto da de sí el coche que tenemos. Lo triste es que en esas conversaciones los heroicos pilotos de Fórmula 1 son vistos por los demás como cracks al volante. Más tarde, ven a una señora a 90 en una carretera que tiene un límite de velocidad de 100 y le llaman de todo por ir a paso tortuga.

Desprenderse del cichlé paternalista cuesta, porque se ha de aceptar que lo que hay detrás de esa preocupación es una infravaloración de las posibilidades de la persona que tienes al lado.




Ana* -

Pues yo no sé en qué mundo vivo últimamente, que había visto el anuncio en cuestión y me había quedado tan pancha. Pero luego le he dado un par de vueltas al tarro después de leer tu entrada, Bambo, y resulta que sí, que tienes razón. Y a mí me la habían colado complentamente.

Y ahora voy a contar yo mi anecdotilla en la modalidad \"mujer en bicicleta, coge la metralleta\". En realidad ir en bicicleta por ciudad es relativamente fácil si estás acostumbrada a circular en coche y no hay mucho tráfico. Yo siempre prefiero coger la bici si puedo. Pues estaba yo esperando que se pusiera un semáforo en verde cuando llega un tío en su coche, se tiene que detener a mi altura y me suelta: \"te vas a caer\". Así, sin más, como si yo fuera gilipollas o una niña pequeña o... que sé yo. Ni os podéis imaginar lo que le dije a aquel subnormal. Y otra vez un par de niñatos en moto se me echaron encima intentando hacerme perder el equilibrio (¿habéis visto que a algún ciclista varón le hayan atacado de esa forma? Yo, nunca). Me sé más, pero ya lo dejo porque me enciendo mucho.

Los abueletes del paso de cebra también tienen una delegación en el barrio de San Blas, lo digo para vuestra información.

Y sí, yo creo que las mujeres somos más prudentes y por eso ante la duda en una maniobra hacemos lo que menos riesgo conlleve; pero eso no es lo mismo que indecisión. Al menos es mi manera de enfocarlo.

Bambo -

Lo de los abueletes a la altura de un paso de cebra también ocurre en mi pueblo, Sinfo. Seguro que alguno que vive en Leganés tiene a su hija o hijo viviendo aquí y en una de sus visitas, ha implantado la costumbre entre sus amiguetes de paseo y tertulia, :-D

¿Qué decir de ese aire de condescendencia, de esa mirada de superioridad, de esas palabras que se pueden leer en los labios del Jefe Superior del Tráfico Rodado de la Calle de la Resurección Mariana -por poner un ejemplo- cuando te observan maniobrar, adelantando que no vas a ser capaz de meter el vehículo en ese mínimo rectángulo?

Sobre el anuncio del café ya hablamos hace un tiempo por aquí, Elisa. Hubo disparidad de opiniones, creo recordar. A mí no me pareció -ni me parece- muy acertado, por lo de la ley de Thalión... Hubo quien dijo que las cosas hay que tomárselas con más sentido del humor. Quizás no les falte razón... aunque tengo dudas al respecto. Para mí que los hombres sí que saben abrir una caja de café y sumar mentalmente, todo a la vez... Y muchas cosas más, :-D

Bambo -

Aviso para navegantes: no me hago responsable de cómo esté escrito todo lo que se pueda leer de aquí en adelante. Tengo la tensión en el suelo del piso inferior al mío, esto es, en la calle, y los ojos me hacen chirivitas. Aún con todo, soy masoca y estoy dándole a las teclas con los ojos semicerrados -chute de internet para paliar un poco la disciplina que me he marcado-. He dicho. Retomo -o no, porque todavía no he abierto la boca al respecto del anuncio de marras-:

Insisto: muchos confunden prudencia con indecisión, y paciencia con temor al volante. Resultado: un generalizado menosprecio al conductor de un vehículo cuando se tienc la certeza de que éste es una mujer.

La seguridad en nosotras mismas es muy importante en esta historia: nos han machacado tanto con nuestra presunta incapacidad al volante que es sentarnos en el asiento del piloto y dejarnos la autoestima en el bordillo de la acera.

A mí me gusta mucho conducir y eso que sólo tengo el carnet cinco años. Tardé mucho en decidirme y nunca hubiera imaginado que iba a disfrutar con un automóvil entre las manos. No estoy obsesionada con el coche -de hecho, no entiendo un pijo de marcas y modelos... me he tenido que enterar un poco a la fuerza, ahora que he comprado uno nuevo-, pero me ha dado mucha más libertad de movimiento. Algo que siempre había considerado superfluo. Máxime, si se tiene en cuanta que está Zas por el medio.

El anuncio es una magnífica representanción de un machismo escondido, subliminal, que no es evidente a primera vista -los abonados a los eufemismos, lo llamarían \"machismo de baja intensidad\"-, y que por tanto, va haciendo poso en el ideario social -ufff, se entiende ¿no?- y reforzando los falsos estereotipos.

elisa de cremona -

ahhhhhh lo de siempre... pero has visto ese de \"felicitaciones chicos, ahora podeís hacer dos cosas a la vez\"? la tabla del uno y abrir el café??
jajajaja esa es respuesta, no?
un beso

sinfo -

No os vayais a pensar que soy una de esas feministas mataviejos que abundan por las carreteras, ¿eh?.
Que yo soy muy moderada, ¡pero mucho!. La más.
:-p

Bielka -

Jajajajaja, Sinfo. Ay, me parto. Qué cosas ocurren por allá. Pues nada, ya nos contarás como evoluciona la nueva costumbre.

sinfo -

Un off topic de esos:

los viejecitos de mi barrio han sacado la puta costumbre de pararse en la acera, ante el paso de cebra. Hasta ahí bien, porque pudiera ser que quisieran las gentes cruzar y por eso.
El caso es que una, que es conductora responsable aunque madrileña, se detiene para que crucen.
Entonces cogen, levantan la manita y te hacen señas de que sigas, que ellos no van a cruzar y te ceden el paso. Cuando ya te has parado, claro.
Y no son uno ni dos, que son muchos del barrio. No sé, para mí que es una especie de delirio de poder sobre el tráfico, camuflado de generosa cesión de derechos.

Más de una vez he pensado bajarme y agarrarles del cogote pa que crucen de una vez. No lo he hecho porque llevan garrota, pero como pille a uno desarmado, se entera.

Respecto al último que me estuvo indicando para aparcar (era uno de ellos, sí), abrí la ventanilla y le dije con mi gesto más borde que lo dejara, que ya me las arreglaba yo.

Se quedó como perplejo. En fin...

¿Es heavy todo esto que he contado?.No, no para Leganés

Lía -

Una vez más la publicidad sexista...
No hace falta que sean los de AXE (y ahí siguen pese a las miles de denuncias que reciben cada año) para que chirríen los trasfondos sexistas. Y si ya es en temas como el de los coches (que sienten tan \"suyos\"), pues...

Referente a como conducimos las mujeres, he de decir que las he conocido buenas, muy buenas, y auténticas temerarias...pero nunca he sentido que una mujer haga de su coche un distintivo de identidad, como en el caso de los hombres. Al menos no hasta ese punto.

Es curioso que ellos suelen tener coches grandes hasta para ir al trabajo, y ellas, aún disfrutando de la misma situación económica que ellos, teniendo que ir a trabajar, a hacer la compra, a recoger a los niños del cole....suelen llevar utilitarios...

Yo particularmente soy una conductora prudente. Al menos ni he tenido ni he provocado nunca un accidente. Pero entre conducir y que me lleven, prefiero que me lleven.

Ah, y de las cosas que más me fastidian, son esos que te observan y hasta te hacen indicaciones cuando estás aparcando. Vamos, vamos...

Saludos

Fili -

El anuncio me parece un espanto, por cierto. Una compañía de seguros no debería jugar con esos tópicos, más que nada porque podría perder cuota femenina. Quizás se haga referencia a esas \"pequeñas torpezas\" de algunas personas cuando conducen, y más si son conductores noveles. Me gustaría colocar ahí aun \"neng\" maquinero y descerebrado en lugar de a la mujer cincuentona. La cosa, evidentemente, ya no sería tan inocente y sí más peligrosa. Precisamente la semana pasada me pitó uno de esos \"nengs\" agilipollaos cuando él entraba con su coche (pequeño-potente-megaherziado) en contradirección mientras yo cruzaba un semáforo. Es normal en estos casos, ya que él no veía el carril derecho, por el que debía entrar, debido a que conducía con una mano en el volante y otra tapándose el ojo derecho, vaya usted a saber por qué extraña y filosófica razón.

Yo no soy conductor, y reconozco que si lo fuera, sería de los torpes. Las pocas veces que lo he intentado, me ha salido fatal. Me da mucha pereza sacarme el carnet de conducir. Nunca lo he visto necesario y los coches no me gustan demasiado. Por lo que veo, la gente es muy, pero que MUY, irresponsable al volante. El problema está en que creemos estar por encima de nuestras capacidades y de las de los demás. Cualquier persona al volante es un peligro constante. Hasta los más pacíficos se tornar irascibles y competitivos. Todo empieza desde el modelo de coche hasta la potente arrancada en un semáforo, cuando no es la potente frenada al ver el semáforo en rojo.

sinfo -

Yo creo que en esto, como en todo, es cuestión de que las mujeres empecemos a estar seguras de nosotras mismas de una puñetera vez.

Ese empeño que tienen algunos en estar constantemente evaluándonos, al conducir o al hacer cualquier otra cosa de las tradicionalmente masculinas, tiene mucho de papanatas y de iluso.
Pero la verdad es que todavía cuela eso de dejarnos someter a examen; por esta razón, cualquier bandarra que no sabe hacer la o con un canuto aún se sigue considerando autorizado para dar clases a las mujeres.
Y cuela. ¿Por qué cuela?: porque aún no creemos nosotras mismas en nosotras mismas como tenemos que creer.

Yo conduzco como conduzco y punto pelota.
(Es a lo madrileño, por cierto, y con eso ya está todo dicho, jajaja).

Al que no le guste, que mire pa otro lado. Si hago alguna pirula ya me hago responsable, ya, que para eso soy adulta.

Los del seguro ese son otros listos. Tienen que subir de alguna manera el ego masculino de sus asegurados, porque efectivamente la realidad objetiva dice que las mujeres son conductoras más prudentes. Y esas cosas se saben, claro.

Bambo -

Yo no he llevado nunca un trasto de esos, Bielka, pero lo de la distancia de los pedales con respecto a los asientos, aunque éstos estén regulados, ya me lo han comentado un par de compañeras que sus maridos tienen coches enoooooormes. Lo de los semáforos es flipante... y lo de las rotondas, que te pitan enseguida para que salgas, como si fueras una lela que no sabe darse cuenta de que cuando no viene un coche... eso me pone del hígado, sobre todo, porque casi todos los coches que no ponen intermitentes para indicar que maniobra van a hacer una vez incorporados a uno de los carriles de la rotonda, son hombres, y así, sin saber si el que pasa por delante va a marcharse en la siguiente salida o por contra va a seguir rodando hasta la otra, a ver quién es el chulo que se mete...

Sponge, tienes razón que tenemos formas de conducir diferentes, de ahí que los índices de siniestralidad sean distintos y que los de los accidentes graves correspondan la mayoría a hombres... Pero ¿eso nos convierte en memas cuando tomamos un volante? Yo también he visto mujeres haciendo barbaridades, cómo no, es lógico. Pero ninguna comparable a las que he visto hacer a los hombres. La indecisión, lo del paso o no paso, puede afectar a otros conductores, sí, pero casi siempre afecta porque los que vienen detrás son unos impacientes y porque no tenemos conciencia de la responsabilidad que supone el manejar un automóvil. Eso mismo que cuentas se lo he visto yo hacer a hombres mayores y detrás tener a jovencitos maquineros y ni te cuento los bocinazos...

Yo no creo, sinceramente, que nuestra capacidad para conducir sea inferior o menor a la de los hombres. Puede que de tanto decirnoslo, muchas lo tengan asimilado como cierto y se asusten. Y lo que está claro es que una persona asustada, mejor que conduzca un vehículo. Pero, como capacidad, a mí me da que la misma. Y en el anuncio es eso lo que cuestionan: mujer, encima ya no tan jovencita... castaña asegurada. Mensaje: hombre triunfador -por la ropa, por el aspecto y por el cochazo-, no te preocupes de lo que las ideas de libertad o independencia de tu mujer -como sacarse el carnet siendo ya mayor- puedan acarrearte, ahí estamos nosotros para que estés seguro de que si a tu coche le pasa algo, lo tendrás arreglado enseguida. Es más de lo mismo... y ya lo dije en el escrito: ellos mismos se contradicen, porque emplean a una mujer para, digamos, ridiculizarla por una supuesta negligencia conduciendo, y luego, a la hora de aplicar las tarifas de sus seguros, a esa misma mujer le harían un descuento porque según las estadísticas es más de fiar. No hay por donde pillarlo...

Sponge -

Joer, ando escasita de comas...

Sponge -

Os vais a sorprender con mi comentario, pero he de decir que, en mi opinión, hombres y mujeres no tenemos la misma forma de conducir y que, también en mi modesta opinión, los hombres tienen más desparpajo pa estas cosas. Me explico: si bien creo que las hostias más impresionantes se las pegan los tíos, también soy de la opinión de que las mujeres son especialmente torpes en ciertos aspectos que provocan accidentes insospechados. Por ejemplo, según he observado, la rapidez de reflejos es un punto a favor en hombres, en contra para las mujeres. La indecisión (paso o no paso, adelanto o no adelanto, paro o no paro, etc) afecta mucho más a las mujeres, y eso puede crear serios problemas a los demás conductores que están a su alrededor. No lo digo con ánimo de ofender ni nada, pero creo que hay muchas menos tías con mentalidad de conductor que tíos. Personalmente, las burradas más extrañas al volante se las he visto hacer a mujeres. No en plan salvaje, sino en plan torpeza. Una vez vi a una chica dejar un coche cruzado como si fuera el palito intermedio de la H mayúscula entre otros dos coches al tratar de sacarlo de un aparcamiento en batería. ¿Entendéis lo que quiero decir?
No meto en el saco a todas las conductoras, sólo digo que me parece una tendencia. También he visto a mujeres conducir estupendamente y a hombres meter la pata hasta el pescuezo. Pero no es lo habitual.
En fin, que se me va la olla ya a estas horas. Por cierto, la operación de mi padre muy bien, ya os contaré más, que me voy toda la semana a casita para echar una mano.

Bielka -

Pues sí que debes estar harta, sí. No he visto el anuncio pero por lo que cuentas es de topicazo absoluto. Por eso tendrá éxito, porque los tópicos venden mucho.

Yo conduzco un coche de gran cilindrada (bueno, muy de vez en cuando porque no me gusta conducir) y siempre noto como, en los semáforos, los hombres quieren dejar claro que ellos salen antes que yo con un coche con menos potencia, así que se disparan. Yo los dejo, claro, que se den la hostia ellos.

De todas formas, los coches de gran cilindrada o deportivos están hechos para hombres porque para llegar al embrague tengo que poner el sillón lo más cerca posible del volante. Vamos, que no me llegan los pies a los pedales y eso que soy más alta que Almodovar.